martes, 27 de diciembre de 2016

Morón de la Frontera, castillo de Morón


Morón de la Frontera, pueblo situado en el sureste de la provincia de Sevilla, es la población más importante de la comarca de la Sierra Sur. A Morón se la llama así desde que los romanos la nombraran Maurorum, o sea de los moros, por creer que sus pobladores eran originarios del norte de África. Luego los árabes la nombraron Mauor, que evolucionando llegó al Morón actual.
Y es de la Frontera porque formó parte de aquel conjunto de torres y castillos, que configuraron la que se llamó Banda Morisca, dedicados a defender las tierras reconquistadas. Ese carácter fronterizo es, al igual que a otros muchos pueblos, el que le dio el apellido.
De aquel pasado, y sobre un cerro que domina el pueblo y un amplio paisaje, quedan los restos —que a este paso y como no se ponga remedio, lo que en breve veremos serán despojos— de lo que tuvo que ser un fuerte y hermoso castillo; su tamaño y sus ruinas así lo delatan.
Morón desde el castillo; la iglesia de San Miguel en primer término.

Los árabes edificaron las murallas existentes sobre los restos de las que levantaron los romanos y después los visigodos.
Antes del siglo XI, Morón ya era una población consolidada y políticamente importante, llegando a ser capital de una cora —división administrativa de Al Andalus—, convirtiéndose desde 1018 hasta 1066 en uno de los primeros reinos de Taifa que surgieron cuando se descompuso el Califato de Córdoba. Durante todo ese período tuvo un carácter de auténtica ciudadela musulmana y un tamaño y estructura típica de alcazaba.
La torre albarrana en su facha sur.

Pero como no podía ser de otra manera, en 1240 Morón es reconquistada por Fernando III, el rey Santo —exactamente el 22 de junio de 1240—, y empieza un ir y venir de propietarios:
—Alfonso X cederá villa y castillo a la ciudad de Sevilla en1253, pero volverá a la Corona en 1285.
—Reinando Sancho IV otorgará la ciudad a la Orden de Alcántara. El castillo permanecerá en manos de los alcantarinos hasta 1378, siendo la única encomienda que tuvieron fronteriza con el Reino de Granada.
—Vuelta a la Corona de Castilla durante el reinado de Enrique II.
—En 1461 pasa a manos de la familia Téllez-Girón, Duques de Ureña, que administraron la villa hasta la abolición de los señoríos.
Durante todo ese tiempo en el castillo residieron algunos nobles, tales como los Duques de Osuna o los mismos de Ureña, que lo ocuparían hasta el año 1651.
Para adaptarlo a ese nuevo uso se realizaron reformas y ampliaciones, levantándose estancias palaciegas que se decoraron profusamente. En su interior también se construyeron diversas edificaciones de servicio, incluida una iglesia, la de la Magdalena.

—El castillo estuvo habitado hasta 1615, en que fue abandonado. A partir de entonces se ve sumido en un largo proceso de deterioro.

—Durante la Guerra de la Independencia estuvo ocupado por las tropas de Napoleón que realizaron en él obras de refuerzo importante. Pero siguiendo su tónica general lo bombardearon en su huida, destruyendo gran parte de la muralla y algunas torres.
Acceso al castillo por lo que fue la Puerta de Poniente.

Su actual deterioro proviene en parte del mal uso que se dio durante la Guerra Civil en el pasado siglo, al ser utilizado como refugio de multitud de familias que lo ocuparon. Pero sobre todo por el constante expolio y desmantelamiento sufrido por parte de los lugareños durante largos períodos de tiempo —siglos XVII y XVIII—. Lo normal en estos casos.
A mediados del siglo XX se demolió gran parte de la ciudadela para construir un depósito de aguas, y se han hecho algunas construcciones que no han tenido ningún respeto para con el edificio, destruyendo resto o tapándolos.
Torres junto a la puerta de Poniente.


Me llama la atención que un municipio como éste, que posee un castillo de estas proporciones y un pasado tan significativo, no luzca en su escudo ese mueble heráldico. Lo que me lleva a conocer por qué es un caballo y no el castillo lo que ocupa el escudo.
Y es que, cuenta la leyenda, que el 22 de julio de 1240, día en que los cristianos toman la fortaleza, el caballo del adalid —caudillo—del castillo se desbocó tras ser abatido su jinete por el infanzón Rodríguez Gallinato; el animal corrió desbocado hacia la alcazaba, cuyos guardias abrieron para que entrara el caballo. Momento que fue aprovechado por las tropas castellanas para acceder al interior y tomar así la fortificación.
Esquina suroeste.

Pero continuemos con el castillo:
El cerro sobre el que se asienta el castillo delimita su planta: ligeramente rectangular, o más bien ovalada, de unos doscientos metros de largo por cien de ancho. Se configura en dos espacios:
— El más elevado es donde se encuentra la torre del homenaje—conocida como la Torre Gorda por su desmesurado tamaño comparado con el resto de torres—, que se eleva prácticamente en el centro del cerro. Su aspecto actual, como el del resto del castillo, es de un avanzado deterioro presentando la ausencia de dos pisos que no llegaron a construirse. Fue edificada por los Condes de Ureña y se sabe que los trabajos fueron paralizados en 1531 por orden del mismísimo Emperador que, parece ser, no mantenía buenas relaciones con los Téllez-Girón. En un principio se pensó dotarla de foso pero al igual que con su altura, esta parte de la obra también quedó incompleta.
Como ya he dicho, su tamaño es desmedido: 23 por 21 metros en planta y un espesor de muros de casi siete metros —realmente se enfundó la torre existente en otra mayor—
 En esa zona más elevada también debieron estar la mayoría de las dependencias del castillo y la iglesia.
Fachada este de la Torre del Homenaje.

Fachada oeste de la Torre del Homenaje.

—A un nivel inferior y cercando el cerro, discurre la muralla, de la que aún se conservan seis torres, una de ellas albarrana, y todas de planta rectangular a excepción de dos situadas hacia el nordeste. Pertenece ese fragmento a la zona norte; del resto se aprecian las cimentaciones y en algunos caso los arranques.
Todas las torres de la muralla son macizas hasta la altura de la muralla, a excepción de una situada en el extremo oeste junto a la puerta del Poniente.

Tuvo cuatro puertas, una orientada al sur, la Puerta de Poniente; otra al este, denominada del Mediodia; la llamada de Oriente se abría al noroeste; y hacia el oeste se orientaba la Puerta del Cordón. De todas ellas, sólo la última era en recodo, las demás tenían el acceso directo.
A la derecha la torre que protegía la puerta del Mediodía.

Todo el edificio está ejecutado con mampostería de piedra caliza, presentado escasas zonas de tapial —el poco ladrillo que se colocó está en algunas verdugadas decorativas—. En las esquinas se utilizaron sillares de arenisca. Es gracias a estos materiales y al grosor de sus muros, que la fortificación ha llegado a nuestros días, aunque sea en las malas condiciones que presenta.
Torre de la fachada norte.

Resumiendo: a pesar de su lamentable estado, se puede afirmar que el castillo debió de ser una obra monumental, de proporciones casi propias de una alcazaba. Una ruina digna de ser paseada.

Nombre: Castillo de Morón de la Frontera.
Municipio: Morón de la Frontera.
Provincia: Sevilla.

Tipología: Castillo.
Época de construcción: siglo VIII, reformado durante los siglos XV y XVI
Estado: En pésimo estado de conservación, olvidado y sucio.
Ni siquiera se podría decir de él que es una ruina consolidada.
Propiedad: Pública, Ayuntamiento de Morón de la Frontera.
Uso: Ninguno.
Visitas: totalmente libre, sin trabas para acceder a él.
Protección: Bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español.
Está declarado Bien de Interés Cultural, inscrito como monumento desde el 29-06-1985

Clasificación subjetiva: 3, o sea, que se incluirá obligatoriamente en una ruta de viaje y se hará todo lo posible por visitarlo. Pero esto es más bien por la pena que, generalmente, produce contemplar unas ruinas y la imaginación que le echo yo a estos lugares.
Cómo llegar: Desde Sevilla, y en dirección a Málaga por la A-92 desviarse a la derecha a la altura de Arahal (A-8125). Nos llevará derechito a Morón.
Una vez allí, desde el centro del pueblo, es fácil y cómodo llegar hasta el castillo en un breve paseo a través de varios caminos.
Otras cuestiones de interés:



No hay comentarios:

Publicar un comentario