No estaba previsto hacer parada aquí durante el camino, y
tampoco era mi intención molestar a mi compañía,
que dormitaba tranquilamente a mi derecha, así que me limité a mirar de
reojo, y a cortos intervalos el promontorio y las ruinas que siluetean su
cumbre, memorizar el lugar y prometerme que éste sería un próximo paseo fingido (*). Y en ello estoy,
aunque sea un año después.
![]() |
de elarteencuenca.es |
Si la carretera por la que circulaba era una CM, es
porque estaba en Castilla-La Mancha —por cierto, que poco, o nada, me gusta la
denominación para esa comunidad, antes regiones— y más concretamente en la
provincia de Cuenca. Según aprecié, así de soslayo, el pueblo es pequeño: 126
habitantes dice Wiquipedia. También
dice que la comarca donde se sitúa se llama la Serranía Media —la página turismocastillalamancha.es lo ubica en
la Serranía Baja, pero a mis efectos actuales me da lo mismo— y que es antiguo,
aunque no mucho. Da una fecha, 1360, y un dato, que fue un señorío que
perteneció a los Villodre, y nombra a uno de sus señores, don Garci Fernández
Villodre.
Pero aún hay datos más antiguos sobre el lugar. Por
ejemplo, sobre por las rentas fijas que las salinas allí existentes —de ahí el
apellido del topónimo— se otorgaban de parte de la Corona al obispado allá por
1220, pues de siempre su control y administración estuvo bajo la supervisión
del Estado. Hasta el año 1860, en que éstas y las de toda España, se liberaron pasando
a propiedad privada, totalmente, en 1869. La de Monteagudo fue liberada en 1865.
Hasta bien entrado el siglo XX, las salinas siguieron
produciendo tan preciado producto gastronómico, hasta 200.000 kg. anuales.
Pero vayamos al castillo, que es el propósito de esta entrada.
![]() |
de elarteencuenca.es |
EL CASTILLO:
Sus orígenes y
primeras estructuras son musulmanas, datadas en fechas anteriores al año 1000,
si bien todo lo actualmente conservado es cristiano.
Está documentado que
Alfonso VIII donó la fortaleza al obispado de Cuenca en 12 de abril de 1187; a
lo que añadió el portazgo que
conllevaba, pues era considerado como importante lugar de paso hacia levante y,
como, hacía de puerta. El castillo siguió en uso y fue reformado en diversas
ocasiones durante los siglos XIV y XV, de ahí que conserve elementos
característicos del Medievo y del Renacimiento.
![]() |
de lasnoticiasdecuenca.es |
LOS DETALLES:
Mirar el castillo
desde la lejanía hace pensar que surge de la montaña, que forma parte de ella;
y es que es tal el perfecto ajuste que la edificación tiene sobre la topografía
del terreno que uno se siente engañado y
cree que todo es uno: montaña y castillo, todo es la misma roca, un tronco de
cono de culmina en la fortaleza. Otro de esos cerros perfectos, que no sólo es
Jadraque, a pesar de lo que dijera Ortega y Gasset.
Y a eso hay que
añadir su gran extensión —unos 2.125 m2— delimitada por unas murallas de más de
dos metros de espesor que, a duras penas, se conservan en todo su perímetro. Un
perímetro que conforma un polígono irregular, casi trapezoidal, si no fuera
porque una de sus bases —la menor—, orientada al suroeste, es un muro curvo;
como también lo es el muro del este que, al igual que el anterior, son los que
se van adaptando totalmente a la roca del terreno.
![]() |
de elarteencuenca.es |
Todas las murallas y
torreones han perdido gran parte de su altura y, por supuesto, su almenaje.
El acceso se realiza
por la esquina del este, donde aún conserva la puerta primitiva, a la que se
llega a través de un camino abierto, a tramos en la roca. También existe otra
puerta abierta en la muralla, en tiempos recientes, sin ningún criterio.
De las torres que lo
defendían, sólo quedan tres de sección circular, orientadas al noroeste dos de
ellas y una al sureste; y otra, cuadrangular, en el también lienzo sureste. Al
noreste, un tramo recto de muralla, en rehabilitación según aprecio en algunas
fotos de la red, conserva otra torre
de planta rectangular. También, algunos contrafuertes jalona y sujetan la
muralla.
![]() |
Interior del castillo, el aljibe, (de elarteencuenca.es) |
El interior está totalmente diáfano, ha perdido todas sus edificaciones. Sólo se mantienen los restos de un aljibe en el centro de la edificación.
En el interior del
patio de armas se conserva el aljibe, parcialmente cegado por escombros y por el tiempo.
Todo el castillo fue
construido con mampostería y sillarejos —casi todo extraído, con toda
seguridad, de la propia talla de la montaña— tomados con mortero de cal.
RESUMIENDO:
Nombre: Castillo de Monteagudo de las Salinas.
Municipio: Monteagudo de las Salinas.
Localidad: Monteagudo de las Salinas.
Provincia: Cuenca
Tipología: Castillo.
Época de construcción: posiblemente antes del año 1000, pero sus primeros datos son de finales del siglo XII.
Estado: En mal estado conservación, a caballo entre ruina consolidada y progresiva. Las piedras que, con el tiempo, se han desprendido de sus murallas, han sido aprovechadas por los lugareños.
Propiedad: Pública, pero desconozco el propietario concreto.
Uso: Ninguno, por decir algo, más bien su uso es abandonado.
Visitas:
Está declarado Bien de interés Cultural.
Clasificación subjetiva: 2, o sea, si se pasa cerca y se va con tiempo pues se acerca uno a verlo. Es decir, que se incluirá en una ruta de viaje pero no pasa nada si luego no se visita.
Cómo llegar:
No hay comentarios:
Publicar un comentario