Nombre: Torre de Mesa Roldán o de La Mesa Roldán.
Localidad: Carboneras.
Municipio: Carboneras.
Provincia: Almería.
Tipología: Torre costera artillada.
Datación: siglo XVIII.
Situación: se encuentra en el término municipal de Carboneras, a medio camino entre la Punta de la Media Naranja y la de Los Muertos, o sea en el Parque Natural del Cabo de Gata-Níjar, sobre un promontorio de escasa pendiente hacia el norte, que es su acceso, y muy escarpado hacia el este y sur. Se trata de uno de los puntos de mayor altitud —más de 210 metros— del litoral almeriense, a la vez que más curiosos, pues el terreno es un domo volcánico, lo que viene a ser el tapón de un volcán.
El topónimo mesa es como se denomina a la elevación del terreno, de laderas abruptas, coronadas por una plataforma.
A su izquierda está el faro del mismo nombre. Este faro, con un alcance de 23 millas y una señal de 4 destellos cada 20 segundos, entró en funcionamiento el 31 de diciembre de 1863, y fue electrificado en 1972. Es el segundo faro más alto de España, después del de la Torre de los Lobos en Realquilar.
El faro desde la torre. |
Datos históricos:
Ya había noticias en 1497 de una torre de origen árabe en este lugar. Se trata de una instrucción por la que se le asignaban una guarnición de dos soldados.
Un informe de 1571 señalaba que, tras la expulsión de los judíos, la torre se encontraba en estado de abandono, por lo que se nombró a Hernando de Hurtado, en 1584, para que realizara las obras necesarias que reactivaran la actividad militar de la torre. Pero nunca llegaron a realizarse.
Hasta el siglo XVIII fue la guarnición del castillo de Carboneras la encargada de vigilar los alrededores de Mesa Roldán.
La torre que hoy vemos es otra más de las trece —se construyeron doce, de las cuales se conservan diez— que incluía el “Reglamento que Majestad manda observar a las diferentes clases destinadas al Real servicio de la costa del Reino de Granada en 1764”, y que fue publicado el 18/agosto/1764. Ese reglamento se redactó como consecuencia del informe que firmó Antonio María Bucarelli y Ursúa — antes de que marchara a América a ocupar el cargo de Gobernador y Capitán General de la isla de Cuba primero, y Virrey de Nueva España después—, que contemplaba las necesidades que tenía la costa del Reino de Granada en lo que a su defensa y prevención contra ataques de piratas berberiscos se refería, y cómo debían de ser cubiertas.
Su construcción vino a sumarse al sistema defensivo de la costa mediterránea que desde hacía tiempo se había comenzado a ejecutar: bien con nuevas torres almenaras, o con el aprovechamiento y reutilización de otras de origen árabe. Además, el Reglamento de 1764 vino a ampliar aquel sistema con la construcción, hasta bien avanzado el siglo XVIII, de torres almenaras, de casas fuertes y de baterías para dos y cuatro cañones, situadas en ensenadas y dotadas con elementos suficientes para repeler desembarcos de piratas y similares.
Torres como la de Mesa Roldán son el resultado de la evolución de la torre costera: se pasa de su utilización como punto de vigilancia y aviso, a lugar desde el que poder rechazar al enemigo con artillería; la torre deja de ser una simple almenara para pasar a convertirse en un baluarte, un bastión artillado que, en el caso de estas torres, denominadas de pezuña, era de dos cañones.
Se edificó según proyecto de José Crame, y sus obras terminaron en diciembre de 1766. Fue sufragada por Carlos de Aguado en la cantidad de 85.000 reales, que era lo presupuestado por la Corona; por ello obtuvo como recompensa el grado de Capitán de Caballería y sus correspondientes emolumentos.
A la torre se le asignó una dotación de un cabo y tres torreros que estarían abastecidos desde el castillo de Carboneras.
En 1768, durante una fuerte tormenta, fue afectada por un rayo que apenas la dañó, pero sí a los cobertizos que tenía adosados, manteniéndose operativa.
Una vez construida se observó su inutilidad pues al encontrarse tan elevada con respecto al plano del mar, a la vez que tan distante, hacía ineficaz el tiro de su artillería. A su favor hemos de decir que como atalaya era excelente,
En la segunda mitad del siglo XIX fue asignada Cuerpo de Carabineros, pero no hay constancia de que fuera ocupada.
Terminada la Guerra Civil, pasó a la Guardia Civil, como todos los edificios que habían sido ocupados por los Carabineros
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La torre a mediados del siglo pasado (de torresenverde.com) |
Descripción, arquitectura y construcción:
De volumen compacto y proporciones poco esbeltas, su característica más representativa es su forma, que se llamó de pezuña, al igual que las diez que quedan de las trece que se proyectaron.
Su volumen es un troncocónico, de planta semicircular en la cara que mira al mar —al sur—, prolongándose sus lados hacia tierra 7’30 metros, y presentando estos una escarpa de 0’85 metros. La fachada que mira a tierra —al norte—, de 15’10 metros de largo, está compuesta por dos semibaluartes que conforman un hornabeque.
La torre se apoya sobre un plinto de 1`50 metros de altura y que sobresale del plano de la torre unos 0’50 metros.
Otras medidas son: altura unos 11 metros, algo más de 53 de perímetro en la base, y un espesor de sus muros de 3 metros en la cara curva y 1’35 en los del hornabeque.
Es en la fachada trasera tiene el acceso, en un hueco (1) a la altura de la planta primera, situado en la cara interior del semibaluarte de la derecha, a unos 6 metros del suelo, por lo que se entiende que para acceder a la torre siempre fue necesaria una escala que se recogía hacia el interior. Enfrentada al acceso, en la cara interior del otro semibaluarte, se abre una doble aspillera (2) para protección del hueco de la entrada.
Una vez dentro, un pequeño vestíbulo distribuye a dos saeteras (5) para defensa de la fachada norte, y a continuación un pequeño espacio (6) con saeteras para un vigía, que en la actualidad están muy deterioradas. Una corta escalera (7) parte del vestíbulo y baja a la estancia principal. Es de planta semicircular, 8’72 metros de diámetro y 5’25 de altura. En ésta se encuentra la chimenea (12) y unas alacenas (11). La ventilación de este espacio se hacía mediante dos ventanas enfrentadas (9) orientadas a este y oeste, con unos nichos (10) a su lado, para protección de los torreros.
La estancia principal queda cubierta con una bóveda de ladrillo; en su centro se abre un hueco (13) que comunica con la planta baja y que servía para izar la munición.
A la planta baja se llega mediante prolongación de la escalera (7), en dos tramos. Actualmente se puede acceder a ella mediante una puerta, abierta a mediados del siglo pasado, orientada al sur.
En esa planta estuvieron los almacenes y la Santa Bárbara. Su altura interior es de 3’30 metros y se cubre también con bóveda de ladrillo.
A la azotea se llega mediante una escalera (nº 4). A mitad de la subida, se abre un hueco (nº 3) orientado a la entrada. La azotea es amplia, con capacidad para dos cañones de 24 libras, y rodeada por un antepecho en muy mal estado, corrido (barbeta) y sin almenas. Este antepecho quedaba marcado desde el exterior mediante una doble moldura, que recorre todo el perímetro de la torre.
Fachada sur de la torre. |
Fachada trasera, al norte (hornabeque). |
Materiales: toda la torre está construida en mampostería de piedra muy irregular, de mediano tamaño, y está guarnecida casi en su totalidad, tal como fue construida originalmente. El plinto está enteramente desguarnecido.
Los huecos de puertas y ventanas están ejecutados con ladrillos, así como como la moldura del pretil de la azotea y las esquinas de los medios baluartes. Las esquinas del hornabeque son sillares.
Estado: Aunque aparenta estar en buen estado, la realidad es que su inaceptable abandono se hace notar. Esta situación está agravada por la cantera cercana que ha deteriorado no sólo el paisaje, sino también su entorno más inmediato.
En breve tiempo se podrá decir que su estado es de ruina progresiva, por lo que urge alguna obra de restauración.

Los huecos de puertas y ventanas están ejecutados con ladrillos, así como como la moldura del pretil de la azotea y las esquinas de los medios baluartes. Las esquinas del hornabeque son sillares.
Estado: Aunque aparenta estar en buen estado, la realidad es que su inaceptable abandono se hace notar. Esta situación está agravada por la cantera cercana que ha deteriorado no sólo el paisaje, sino también su entorno más inmediato.
En breve tiempo se podrá decir que su estado es de ruina progresiva, por lo que urge alguna obra de restauración.
Propiedad actual: Pública (¿?).
Uso: Ninguno, sólo embellece aún más el paisaje.
Visitas: se encuentra cerrada, por lo que las visitas se limitan al exterior que, por supuesto, son libres.
Protección: Bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español.
Está declarada Monumento Nacional desde 29/junio/1985, y Bien de Interés Cultural desde el 22 de junio de 1993.
Clasificación subjetiva: 2, o sea, que si se pasa cerca y se va con tiempo pues se acerca uno a verlo. Es decir, que se incluirá en una ruta de viaje, pero no pasa nada si luego no se visita, lo que no es recomendable. Mejor ir a visitarla y recrearse con el paisaje, que es de lo mejor de la costa almeriense.

Uso: Ninguno, sólo embellece aún más el paisaje.
Visitas: se encuentra cerrada, por lo que las visitas se limitan al exterior que, por supuesto, son libres.
Protección: Bajo la protección de la Declaración genérica del Decreto de 22 de abril de 1949, y la Ley 16/1985 sobre el Patrimonio Histórico Español.
Está declarada Monumento Nacional desde 29/junio/1985, y Bien de Interés Cultural desde el 22 de junio de 1993.
Clasificación subjetiva: 2, o sea, que si se pasa cerca y se va con tiempo pues se acerca uno a verlo. Es decir, que se incluirá en una ruta de viaje, pero no pasa nada si luego no se visita, lo que no es recomendable. Mejor ir a visitarla y recrearse con el paisaje, que es de lo mejor de la costa almeriense.
Carboneras desde la torre. |
Cómo llegar: Carboneras y Agua Amarga están unidas por la carretera AL-5016; hacia la mitad está el acceso a la playa de Los Muertos y su parquin. Justo al lado parte una estrecha carretera que, en unos minutos, nos lleva hasta la torre y el faro.
Accesos: todo por carretera, después aparcar junto a la torre.
Coordenadas:
36.9416355809281, -1.909380139408834


Accesos: todo por carretera, después aparcar junto a la torre.
Coordenadas:
36.9416355809281, -1.909380139408834


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